Disminuciones de cualquier activo: Representan un origen de recursos cuando estos activos se convierten en efectivo por realizar la venta o por simple cambio; los activos que se pueden disminuir son Inversiones temporales, Cuentas por cobrar, Inventarios, Pagos anticipados, etcétera.
Incremento de cualquier pasivo: Corresponde a los financiamientos que obtiene la empresa para contar con efectivo con el fin de hacer frente a sus compromisos.
Utilidades netas después de impuestos: Por tratarse de las utilidades que generó la empresa durante el ejercicio, se convierten en un origen de recursos por tener la facilidad de reinvertirse dentro de la empresa.
Depreciaciones y otros gastos que no se cubren en efectivo: El incremento a las depreciaciones afecta los resultados del ejercicio como un incremento a los gastos sin que se realice un desembolso de efectivo; sin embargo, estos gastos sí se incluyen para la determinación del costo de producción y posteriormente el precio de venta, permitiendo que al realizar la venta se le cobre a los clientes estos incrementos a gastos que fueron virtuales.
Venta de acciones: Esta operación consiste en recibir efectivo de los socios o bienes materiales distintos al efectivo y que corresponden a la aportación adicional que hacen los socios originales de la empresa o bien las aportaciones de nuevos socios; dichas aportaciones representan nuevos recursos para que la empresa labore.