Los paneles hechos con virutas, cortezas y otros tipos de fibras derivadas de la madera son una alternativa económica para hacer muebles, que da muy buenos resultados.
Los contrachapados son la “nobleza” de los derivados de la madera, con sus cinco chapas de madera encoladas y prensadas. A menudo se revisten de maderas nobles o, en el caso de muebles de cocina y baño, de PVC, con cualidad impermeabilizantes.
Los aglomerados están hechos de residuos de carpintería que se trituran y “aglomeran” como dice su nombre. Son fáciles de trabajar, pero tienen una textura vasta y porosa, así como mucho peso. A menudo se recubren de melamina.
Los paneles de densidad media o DM también están hechos con fibras de madera que se prensan y se unen con cola. Tienen menos peso que los aglomerados y un exterior más uniforme, por lo que son ideales para acabados lacados, pintados, etc.