La diferencia entre la intensidad del deseo y la resistencia al esfuerzo, la fuerza motivadora para la ejecución del esfuerzo en una tarea determinada.
Si la tarea es demasiado difícil, el hombre no intentará satisfacer el deseo. En esta forma, las tareas más difíciles requieren incentivos especiales, o deben rediseñarse las tareas a fin de que permitan su terminación con una motivación menos efectiva.
Las compensaciones extras son ejemplo del primer caso y las operaciones ayudadas por la máquina son un ejemplo del segundo.
La mayoría de las situaciones del trabajo por el pago se encuentran en desventaja desde el principio. En las plantas industriales los trabajadores ejecutan sin esfuerzo para ganar premios que deberán convertirse posteriormente en la satisfacción de sus deseos.
En esta forma, si alguien desea un bote nuevo, rara vez construye uno; trabaja en un empleo que le paga lo suficiente para comprarlo.
Un trabajador en un empleo que le produce directamente la satisfacción de sus propios deseos, tal como construir un bote, seleccionará los métodos más efectivos que pueda encontrar y trabajará en forma entusiasta.
Los planes de participación de utilidades son intentos para crear en los empleados el sentimiento de trebejar para ellos mismos.
Los esquemas de pago de incentivos y cantidades extra, están disertados con el mismo propósito. Muchos gerentes han concluido que el dinero dado en cantidades rutinarias (tales como una elevación anual para reflejar un aumento en la producción) generalmente se da por hecho, se anticipa antes de que llegue y se considera que es un premio que justamente se merece por servicios anteriores y no como un estímulo para un nuevo esfuerzo.
Otro factor que afecta el sistema de recompensas es el grado de inmediación de las mismas. Es más fácil aumentar la motivación efectiva si los deseos se satisfacen dentro de un lapso breve las compras a crédito son un ejemplo clásico de los intentos para abreviar el periodo de espera para la satisfacción de los deseos.
Algunos dicen que no le debe importar al patrón cómo gastan su dinero los trabajadores; pero si los trabajadores desperdician su dinero y no satisfacen sus deseos, sufrirá el rendimiento en el trabajo.
Un empleado que tiene que usar su salario para pagar antiguas deudas pronto pierde su motivación para trabajar. Los sindicatos y las compañías forman instituciones de crédito y dan asesoramiento al trabajador para ayudar a combatir este tipo de problema.
Nadie ha sido capaz de señalar el factor mágico que llene todos los propósitos de la satisfacción, si es que acaso existe, pero constantemente se están proponiendo nuevas teorías. «La participación en la administración» es un concepto propuesto para buscar el consejo de los empleados en la Administración del negocio y de ahí animarlos a buscar la satisfacción de sea deseos en el éxito de la propia firma.
Este enfoque conducen una organización menos estricta que evita la supresión de las capacidades de los empleados los trabajos se ajustan a los talentos individuales, en lugar de ajustar a las personas a trabajos diserta dos rígidamente.
Algunos teóricos prevén clasificaciones no estructuradas del trabajo y escalas de pago en donde los empleados se intercambiarán libre mente entre trabajos que estén relacionados, y los salarios variarían ampliamente para el mismo trabajo, dependiendo de la habilidad del empleado.
El contenido del trabajo se amplificaría y el concepto de fuerza de trabajo se emplearía para sacar a los trabajadores del problema de la rutina normal a fin de que trabajasen en proyectos especiales tales medidas se están poniendo a prueba, o se consideran como motivación eficiente para mejorar el rendimiento, disminuyendo al mismo tiempo la diferencia entre el trabajo y la diversión.
Fuente: Apuntes de Introducción de Sistemas de Producción de la Unideg