Este tipo de escalas requiere que el entrevistado señale un grado de aceptación o desacuerdo con una diversidad de afirmaciones relacionadas con el objeto de la actitud. En este método de clasificación existe el supuesto importante de que cada uno de los elementos individuales se suma para producir un resultado y mide algún aspecto de un factor común sencillo; de otra forma no se pueden sumar en forma válida los elementos.
Los pasos para diseñar una escala Likert son:
- Se produce un número de enunciados relacionados con la actitud que deben ser claramente favorables o desfavorables.
- Posteriormente se anotan las respuestas asignándoles valores que van desde 1 (respuestas desfavorables en extremo) hasta 5 (respuestas altamente favorable) para cada enunciado.
Esta técnica es sumamente popular, debido a su facilidad de diseño y administración. Las principales reservas se encuentran en las propiedades de la escala ya que, aún cuando existen intervalos, sólo tienen propiedades ordinales.