Contabilidad nacional

Introducción

La contabilidad nacional surgió de la necesidad de disponer de información para conocer el funcionamiento del sistema económico. Los datos que aporta son útiles en todas las esferas de acción que entrañan decisiones económicas y, sobre todo, en la formulación de políticas económicas gubernamentales.

La gran depresión de 1929 impulsó notablemente el estudio económico, por lo que se utilizaron los trabajos previos sobre ingreso nacional en la preparación de estimaciones oficiales regulares sobre ingreso nacional en Estados Unidos y en otros países.

Posteriormente, la Segunda Guerra Mundial y la recuperación, reconstrucción y desarrollo económico de posguerra produjeron mayor expansión en las estimaciones del ingreso nacional para abarcar sistemas completos de “contabilidad social”. Después de la guerra, el uso de tales estimaciones llegó a ser casi universal.

Objetivo de la contabilidad nacional

La contabilidad nacional tiene como objetivo ofrecer una representación cuantificada completa, sistemática y detallada de la economía de un país, sus componentes y sus relaciones con otras economías.

Conceptos básicos de la contabilidad nacional

La contabilidad nacional se sirve de dos conceptos básicos, el de producto o ingreso nacional y el de las cuentas nacionales, conceptos estrechamente relacionados cuyo objeto es lograr un conocimiento más profundo de un sistema económico y que dan a conocer las relaciones de interdependencia entre los sectores productivos de la economía.

El producto nacional se define con el monto total de bienes y servicio que se producen en una economía en un período determinado. Las cuentas nacionales son un conjunto de tablas que indican las corrientes de bienes y servicios entre los sectores de una economía y el resto del mundo.

El producto nacional puede medirse a través de la suma monetaria de los bienes y servicios, una vez que pasan de la esfera productiva a la de consumo; o bien, mediante la adición de todos los pagos a los factores que contribuyen en la producción; estos pagos consisten en salarios, intereses, utilidades, etc., y representan los ingresos personales.