Introducción
Se denomina filosofía medieval a la filosofía dada en Europa y el Oriente Medio durante el período conocido como Edad Media, periodo que se extiende desde la caída del Imperio Romano de Occidente en el siglo V hasta el descubrimiento de América en el año 1492. Desde un punto de vista histórico, la Edad Media se extiende desde la caída del Imperio Romano de Occidente hasta el descubrimiento de América.
Aunque temáticamente, según autores como Gilson, la filosofía medieval se inicia en el siglo II con el diálogo entre la filosofía helenística y las grandes religiones monoteístas.
Por esto algunos autores sostienen que la filosofía antigua pierde su antigua autonomía y deviene ancilla Theologiae, vale decir, pasa a estar subordinada o con una actitud servil con respecto a la especulación religiosa.
Los problemas fundamentales discutidos durante este periodo fueron la relación entre la fe y la razón, la naturaleza y existencia de Dios, los límites del conocimiento y la libertad en el hombre, la naturaleza de los universales y la individuación de las sustancias divisibles e indivisibles.
Fuentes de la filosofía medieval
Las cuatro fuentes principales de la filosofía medieval fueron la filosofía clásica y las tres religiones más importantes de la época: el cristianismo, el judaísmo y el islam. Pese a que el neoplatonismo ejerció alguna influencia, especialmente sobre algunos pensadores islámicos primitivos, Platón fue una figura mucho menos importante que Aristóteles.
Aunque al principio de este periodo la mayoría de la obra de Aristóteles se había perdido en Europa, buena parte de ella fue descubierta a partir del siglo XII por los musulmanes, que habían entrado en contacto con la filosofía griega en el curso de la expansión del islam.
Autores destacados
La obra filosófica de los escritores judíos que vivían en países musulmanes y escribían fundamentalmente en árabe (entre ellos Maimónides, Moisés Nahmánides, Yehuda ha-Leví y Solomon ben Yehuda Ibn Gabirol), y la de los filósofos musulmanes (como Averroes, Avicena, Alfarabí y Al-Kindi) sufrió una acerba réplica teológica debido a los conflictos existentes entre las diversas creencias religiosas y las nuevas especulaciones metafísicas.
Así pues, sólo la tradición filosófica cristiana sobrevivió hasta el final del periodo medieval, en parte debido a que los pensadores cristianos se mostraron menos atrevidos a la hora de afrontar los conflictos entre razón y religión que sus colegas judíos y musulmanes.
Algunos de los filósofos cristianos más importantes, aparte de los mencionados y por mencionar, fueron Pedro Abelardo, san Anselmo, Juan Escoto Eriúgena y Juan Duns Escoto.
Temas de la filosofía medieval
El propósito de la filosofía medieval no era construir grandes sistemas, ni desarrollar visiones del mundo (al menos en este punto guarda cierta similitud con la filosofía del siglo XX). El filósofo medieval ya tenía una visión del mundo: la religiosa.
De hecho, el tema dominante de la época (tanto en los autores cristianos, como en los musulmanes y judíos) fue el intento de conciliar aquélla con las ideas filosóficas clásicas. Durante este proceso emergió una tradición filosófica clara y distinta, a cuya aparición coadyuvó la fundación de las universidades de Bolonia, París y Oxford. En el contexto cristiano, esta tradición filosófica se conoce por el nombre de escolasticismo o escolástica, la filosofía de escuelas y escolares.
Buena parte de las obras del periodo surgieron a partir del estudio de las obras de Aristóteles y de los distintos intentos para aplicar su pensamiento a la teología (ejemplos paradigmáticos de ello fueron san Buenaventura y santo Tomás de Aquino, autor de una de los textos filosóficos medievales más importantes: Summa Theologiae, 1265-1273). No se ponía excesivo énfasis en la originalidad, pero sí existió una cierta tendencia progresiva hacia la elaboración de un pensamiento caracterizado por un mayor grado especulativo.
Algunos temas de importancia, también para escuelas posteriores, fueron el debate entre realismo y nominalismo, la relación entre fe y razón, y el desarrollo de un léxico técnico filosófico a partir del cual poder asentar la especulación lógica y metafísica.
El relativamente lento desarrollo de la filosofía medieval hizo que ésta se viera finalmente superada, a partir del siglo XIV, por el avance más acelerado de las ciencias físicas y políticas. En filosofía, el renacimiento se caracterizó por los trabajos de Francis Bacon, Nicolás de Cusa y Nicolás Maquiavelo, y por un desplazamiento del interés medieval por el aristotelismo hacia la recuperación del platonismo.
No obstante, la filosofía hizo escasos progresos durante el periodo renacentista, que normalmente es considerado como un interregno entre la filosofía medieval y la filosofía moderna. El comienzo de esta última suele ser delimitado a partir de la obra de René Descartes, en parte basa da en el rechazo de buena parte del bagaje escolástico.