Ciudad del vaticano

Introducción

Ciudad del Vaticano (nombre oficial Stato della Città del Vaticano, Estado de la Ciudad del Vaticano), Estado independiente bajo la autoridad absoluta del papa de la Iglesia católica apostólica romana. Es un enclave dentro de la ciudad de Roma, con una extensión de 44 hectáreas. La Ciudad del Vaticano, el país independiente más pequeño del mundo, se fundó en 1929.

Cumpliendo los términos de los Pactos de Letrán, ratificados por el gobierno italiano de Benito Mussolini y el Papado, tras varios años de controversia. En 1984 este tratado fue reemplazado por un nuevo Concordato que, como su antecesor, reconocía la absoluta soberanía de la Santa Sede (jurisdicción del Papa) dentro del Estado de la Ciudad del Vaticano. Para la historia anterior a 1929 de los territorios papales, véase Estados Pontificios.

Gobierno

La esencia del estado de la Ciudad del Vaticano se fundamenta en su unión con la Santa Sede, de manera que el Papa es a la vez Cabeza Suprema de la organización católica romana y Jefe de Estado del Estado de la Ciudad del Vaticano.

En consonancia con esta doctrina, el Vaticano es el único territorio europeo que explícitamente defiende su carácter de teocracia. Formalmente el Vaticano se autodefine como una monarquía absoluta cuyo monarca, el Sumo Pontífice, tiene plenos poderes legislativo, ejecutivo y judicial.

Es también una teocracia electiva, en la que la elección del Papa corresponde al Sacro Colegio Cardenalicio, reunido en Cónclave, según las actuales disposiciones de la Constitución Apostólica Universi Dominici gregis, promulgada por Juan Pablo II el 22 de febrero de 1996 y modificada por Benedicto XVI en junio de 2007.

Sólo el colegio cardenalicio tiene derecho a voto, quedando por tanto excluidos de la elección del jefe de Estado el resto de ciudadanos vaticanos.

El elegido se convierte en papa en cuanto manifiesta su aceptación, siempre que fuera ya obispo, de lo contrario, debe ser ordenado inmediatamente. En cualquiera de ambos casos, el papa recién elegido adquiere, desde el mismo momento de su aceptación (y ordenación en su caso), la plena y suprema potestad en la Iglesia Católica, así como la jefatura de Estado de la Ciudad del Vaticano.

Los órganos de gobierno de la Ciudad del Vaticano no forman parte de la Curia Romana (Cfr. Art.1 de la Constitución Apostólica Pastor Bonus), sino que tiene un ordenamiento jurídico específico.

El segundo al mando del gobierno del Vaticano, después del Papa, es el Secretario de Estado aunque no corresponden a la formación real de Estado, labor que actualmente cumple el cardenal Tarcisio Bertone.

La Ley Fundamental de la Ciudad del Vaticano constituye la norma constitucional más importante. El Papa administra el Estado mediante la Pontificia Comisión para el Estado de la Ciudad del Vaticano, salvo en los casos que entienda reservarse a sí mismo o a otras instancias.

El idioma oficial es el latín, aunque el idioma más hablado es el italiano. La moneda, según un acuerdo suscrito con la Unión Europea (UE), es el euro.

Geografía

El Estado de la Ciudad del Vaticano consta de la ciudad vaticana, propiamente dicha, cuya extensión aproximada es de unas 44 hectáreas.

Sobre la que ejerce total soberanía, y de otros edificios y lugares, tanto en la ciudad de Roma como en el resto de Italia, que gozan del derecho de extraterritorialidad.

Entre ellos, cabe destacar la residencia estival de los papas, el palacio de Castel Gandolfo con sus jardines.

Cuya extensión ronda las 55 ha, y que dista unos 34 km de la Urbe; las basílicas patriarcales de San Juan de Letrán, Santa María la Mayor y San Pablo Extramuros.

Varios edificios más en la ciudad de Roma: la Cancillería Apostólica, el palacio de San Calixto en el Trastévere, la Curia General de los Jesuítas, el Vicariato y el palacio de Propaganda Fide, entre otros, así como el Centro Televisivo de Santa María de Galeria.

Temas medioambientales

La Ciudad del Vaticano en su totalidad fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1984. Los leves problemas ambientales de la Ciudad del Vaticano están en su mayoría relacionados con su ubicación como enclave dentro del distrito metropolitano de Roma.

El efecto destructor de la polución del aire y de las vibraciones causadas por el fuerte tráfico rodado en Roma se han hecho sentir en los edificios históricos de la Ciudad del Vaticano. Las columnas y los pilares de la plaza de San Pedro han sido seriamente dañados y decolorados por la polución del aire.

El aumento de los niveles de monóxido de carbono en la atmósfera, procedente de los vehículos, es considerado el causante de una serie de problemas de salud que sufre la población. Las autoridades de Roma han reaccionado imponiendo restricciones a la circulación de coches y camiones en el centro histórico de la ciudad, que rodea la Ciudad del Vaticano. También la Capilla Sixtina se ha visto dañada por la enorme afluencia de turistas que visitan este lugar cada año.

Economía

La Ciudad del Vaticano tuvo, hasta la entrada en circulación del euro en 2002, su propia moneda (la lira vaticana, que equivalía a la lira italiana). Cuenta también con su propio sistema postal, con una estación de ferrocarril y una emisora de radio, y administra sus propios servicios de teléfono y telégrafo.

Los gastos anuales en 1994 fueron de 175 millones de dólares, en tanto que los ingresos fueron de 175,5 millones de dólares. Se publican un periódico diario y un periódico mensual oficial, así como libros y panfletos en diversas lenguas. El italiano es la lengua del Estado, aunque para los actos oficiales se utiliza el latín. Población (2001), 1.000 habitantes.