La danza del venado es una danza ritual celebrada por los indígenas yaquis y mayos de los estados mexicanos de Sinaloa y Sonora. Esta danza es una dramatización de la cacería del venado, héroe cultural de estos pueblos, por parte de los paskolas (cazadores).
Esta danza se representa en ocasión de las festividades de Cuaresma en las comunidades indígenas, y es una dramatización de la cacería del venado (héroe cultural de estos pueblos) por parte de los pascolame, agentes de las fuerzas negativas del universo. Arturo Warman, un reconocido antropólogo mexicano, consideraba que la música y la letra de la danza del Venado debían haber transitado con muy pocos cambios desde la época prehispánica hasta la actualidad.
Los personajes que intervienen en la danza son los pascola, que van a dar muerte al venado, y el venado mismo. Tanto unos como el otro llevan un atavío ritual. Los pascola cubren sus caras con máscaras de madera, decoradas con barbas de ixtle y pintura de color blanco sobre fondo negro generalmente. Llevan los aperos propios de la caza: arcos y flechas, además de sus sonajas y cascabeles. El venado, por su parte, va desnudo del torso, descalzo y lleva los puños cubiertos por pañuelos.
A veces se cubre la mitad inferior de la cara con un paliacate, y, puesto que su tocado le cubre la frente, sólo lleva los ojos al descubierto. El tocado del venado es la cabeza de este animal, disecada y sujetada a la cabeza del intérprete con cintas de color blanco. En algunas ocasiones, el maso lleva una especie de capa de manta blanca de algodón con motivos florales bordados.
Los instrumentos necesarios para la danza del venado son los siguientes:
– Flautaes de carrizo de tres agujeros
– Tambor de parche; se trata de un tambor de parche con pies de venado o vaca, que es percutido con una vara de madera por la misma persona que ejecuta la melodía con la flauta.
– Tambor de agua; esta constituido por una calabaza o huaje hueco puesta bocabajo sobre el agua contenida en una batea con agua, la jicara se golpea con un palo para generar un sonido grave.
– Raspadores; se emplean en general dos raspadores de madera de unos 30 cm. De longitud con estrias, quese apoyan con dos medias calabazas huecas que funcionan como cajas de resonancias. Para producir el sonido son raspadas con varas de madera o metal.
– Sonajas; se trata de sonajas hechas con calabazas huecas rellenas de piedrecillas de rio o semillas. Las sonajas tiene un mango y son ejecutadas por los pascolame y el maso o venado.
– Cascabeles; los bailadores se sujetan a los pies una cadena de cascables hechos de capullos secos de mariposas “cuatro espejos” con piedrecillas dentro. Al ejecutar la danza los cascabeles suenan.
Fuentes: danzap.blogspot.mx/ wikipedia.org