Las buenas condiciones de trabajo aumentan la motivación disminuyendo la resistencia del hombre al esfuerzo. En casos extremos los efectos adversos de las malas condiciones de trabajo hacen inalcanzables los niveles adecuados de rendimiento.
Por ejemplo, las tareas que dependen de la agudeza visual obviamente son imposibles cuando no existe suficiente luz, y no puede mantenerse el paso esperado de la mano de obra sin una ventilación adecuada y un control de la temperatura.
En la actualidad, estas condiciones extremas son raras en la industria, porque son inoperantes desde el punto de vista social y económico. Pero aún pueden evitarse muchos defectos sutiles en el medio ambiente del trabajo.
Fuente: Apuntes de Introducción de Sistemas de Producción de la Unideg