La división política del territorio ha sufrido grandes cambios a través de su historia. Antes de la llegada de los españoles estaba dividido en reinos y señoríos; durante la Colonia se integró en provincias e intendencias; con la consumación de la Independencia nació su primera división política, que era muy parecida a la actual.
Las entidades federativas o estados están divididas en municipios, y el Distrito Federal en 16 delegaciones.
Las 31 entidades federativas están organizadas políticamente por un gobernador, que es elegido por el voto popular, y en uno de sus municipios queda establecida su capital; cada uno de ellos tiene sus propias características físicas, naturales, de población, sus tradiciones y sus actividades económicas.
Los estados con mayor territorio, en orden decreciente, son Chihuahua, Sonora y Coahuila. La entidad más pequeña es el Distrito Federal, pero en ella se encuentran concentrados los tres poderes de la nación:
- El poder Ejecutivo, representado por el Presidente de la República.
- El poder Legislativo, formado por las cámaras de diputados y de senadores.
- El poder Judicial, representado por la Suprema Corte de Justicia, los tribunales de circuito y los juzgados de distrito.
El Distrito Federal es gobernado por un jefe de gobierno y una Asamblea Legislativa, cuyos integrantes colaboran con él para encontrar la solución a los problemas de la ciudad de México.