Fundamentos y premisas básicas de la innovación

Contenido: Introducción. Todos los seres humanos estamos dotados de la capacidad de crear. La información se ha convertido en un arma muy valiosa para competir. No existen problemas sin solución. La creatividad florece cuando se trabaja en equipo. El éxito estriba en aprovechar los mejores activos de cada persona. Entrenar al personal con diferentes habilidades para hacer innovaciones. Principios de oro de la actitud creativa.

Introducción

Se ha escrito mucho en los últimos años en relación con la innovación y creatividad; por lo mismo, encontramos muchas definiciones y conceptos en torno a este tema. Nos limitaremos a presentar una definición así como a comentar las diferentes premisas básicas de la cultura de innovación, cuyo fin principal es romper esquemas mentales o paradigmas que impiden vivir esta cultura, básica para ser competitivo, en la inmensa mayoría de las empresas mexicanas.

Por innovación entendemos la capacidad que desarrolla el ser humano para encontrar soluciones a los problemas o retos que se le presentan. En virtud de esta capacidad, se modifica el punto de vista vigente, que ha demostrado su ineficiencia para dar respuestas satisfactorias; o bien, se generan situaciones nuevas que habrán de colocar a la organización en situaciones privilegiadas respecto a la competencia.

Es importante mencionar que, desde nuestra perspectiva, la capacidad del ser humano para crear o innovar tiene su origen en la premisa de que somos creados a imagen y semejanza del Ser Supremo. Esta semejanza consiste en que de Dios Padre se nos da la capacidad de crear, innovar; de Dios Hijo se nos proporciona la capacidad de discernir, la inteligencia, y de Dios Espíritu, la capacidad de ‘amar. En síntesis, nuestra semejanza con el Ser Supremo no está en lo fisiológico, sino en el hecho de que sólo al hombre se le ha dado la capacidad de innovar, discernir y amar.

Nuestra tesis es que el Ser Supremo dejó a propósito el universo inconcluso para que cada generación de seres humanos lo vayamos perfeccionando, utilizando estas capacidades que nos son concedidas gratuitamente. Lo único que nos exige a cambio es que hagamos buen uso de ellas, de tal manera que entre más creamos, innovamos, discernimos correctamente y amamos, más nos parecemos a Dios y cumplimos con nuestra misión, que es perfeccionar el universo para generar un mundo más justo y solidario.

La experiencia ha demostrado que el gran reto a vencer para vivir esta cultura de creatividad, no radica sólo en estimular al recurso humano de la organización, sino en motivar el interés para ejercer la creatividad que abunda a nuestro alrededor y que a veces no sabemos detectar. Necesitamos desarrollar en la gente una gran sensibilidad para recoger la multitud de buenas ideas circundantes, pues ciertamente no hay escasez de ellas, lo que suele haber es insensibilidad para identificarlas.

Un caso real y sencillo de lo anterior es el del estudiante que, al llegar a clases, siempre tenía problema para estacionar su automóvil. Ante tal situación, vio una oportunidad para resolver su problema y al mismo tiempo hacer negocio. Rentó un terreno baldío cerca de la universidad en $ 4 000 mensuales y ofreció a otros estudiantes cajones individuales por una renta mensual $ 400. Como en el terreno cabían 20 autos, obtuvo $ 8 000, con lo que resolvió su problema, pudo pagar $1000 a un vigilante y obtuvo una ganancia de $ 3 000 mensuales.

Un caso muy conocido es el de Bill Bowerman, entrenador de deportistas, que sugirió a un importante fabricante de calzado deportivo unas recomendaciones para que su producto cumpliera mejor su función. La respuesta que este fabricante dio a Bill fue: «Nosotros no nos empeñamos en enseñarle cómo entrenar a sus jugadores. Por favor, no pretenda enseñarnos cómo hacer zapatos deportivos.» Gracias a esa respuesta, Bill Bowerman se vio obligado a fundar Nike.

Veamos ahora las premisas fundamentales que deben quedar bien claras, para poder introyectar la innovación en las organizaciones.

Todos los seres humanos estamos dotados de la capacidad de crear

Esto lo explicamos antes. No es válido afirmar que esta cualidad está reservada sólo a unos cuantos. Si analizamos nuestra manera de enfrentar los retos del trabajo, nos quedaremos asombrados de la capacidad de innovación mostrada para resolver nuestros problemas y enfrentar nuestros retos.

Por ejemplo, cuando tenemos problemas para entregar a tiempo un pedido, buscamos la manera de hacerlo y lo logramos; cuando hemos cambia-do el tipo de publicidad para incrementar las ventas; cuando hemos tenido la necesidad de cambiar la forma de remuneración pagando en bonos con base en resultados para tener más éxito. En todos estos casos hemos actuado con creatividad.

Como se ha afirmado en otros capítulos, esta cultura de innovación se da cuando se acepta la necesidad de un cambio de actitud para ser creativo y se han internalizado las habilidades necesarias incorporándolas a las acciones diarias, de tal forma que esta manera de ser se convierte en un sello distintivo de toda la organización. Lo importante es utilizar y desarrollar la capacidad creativa innata en todos, para convertirnos en personas creativas que proporcionen valor agregado a la compañía.

El hombre sólo utiliza un 5%, e incluso un 1% de su capacidad cerebral. y al pensar únicamente en términos de eficiencia sólo el hemisferio izquierdo del cerebro permanece activo, es decir, el que controla las funciones lógicas y analíticas, por lo que se corre el peligro de que las inmensas capacidades creativas –imaginación, sueños, intuición- regidas por el hemisferio derecho queden atrofiadas.

Cerebro
Hemisferio izquierdo
Hemisferio derecho
Lógica
Lineal
Números
Palabras
Orden
Análisis
Ritmo
Global
Color
Sueño
Imaginación
Espacio

Es fundamental que se desarrolle el hemisferio derecho para desarrollar tú creatividad

La información se ha convertido en un arma muy valiosa para competir

La información por sí sola no genera creatividad. El ser humano, a través de su capacidad para innovar, deduce de los bancos de datos ideas maravillosas para enfrentar y solucionar problemas, o bien, identificar oportunidades para la empresa. Por ejemplo, cuando hablamos de control total de calidad, sabemos que la estadística es indispensable para detectar áreas de mejora; sin embargo, la información por sí sola no basta, el individuo, al analizar el significado de dichas variaciones, con su creatividad habrá de implementar acciones que fortalezcan la competitividad de la empresa.

Lo mismo ocurre con la información financiera. Los datos por sí solos no tienen sentido; cobran relevancia cuando el experto encuentra en los indicadores cierto significado que lo lleva a enfrentar con creatividad los problemas. Por ejemplo, al detectar un problema de liquidez, se determina que un factor grave es la alta cartera vencida y la solución para reducirla puede ser la oferta de descuentos de 30% o incluso de 50% del total. Estrategias que no son normales, pero al aplicarlas en etapas difíciles pueden resolver el problema de liquidez.

Otro caso es el de las UDIS, una solución creativa para enfrentar la problemática del pago de créditos hipotecarios de muchos deudores sin capacidad de pago, de acuerdo con las condiciones normales en que obtuvieron sus créditos.

No existen problemas sin solución

Lo que quizá existe es falta de coraje para resolverlos utilizando la creatividad. Tenemos el caso de la poliomielitis que durante tantos años hizo daño a miles de niños, pero gracias al coraje y creatividad de Salk, se descubrió la vacuna para combatirla. Igual que Fleming, quien descubrió la penicilina, medicamento que ha salvado millones de vidas.

Existe una compañía en Monterrey, fabricante de mangueras para dotar de agua a los tanques de los sanitarios para su limpieza. Cuando se inició la apertura comercial en México, los dueños estaban muy preocupados porque se importaban dichas mangueras a un precio equivalente al 80% del costo de la fábrica mexicana. Ante tal situación, en vez de amedrentarse, acudieron a un grupo de expertos, quienes con creatividad y sin invertir nada en activos sólo diseñaron el acomodo de las máquinas actuales e implementaron técnicas como justo a tiempo. Con ello lograron que el costo bajará 30%, así la empresa logró competir con los productos extranjeros e incluso exportar. Se trata de una fábrica de 35 empleados, que tuvo el coraje de buscar soluciones creativas ante la posibilidad de quebrar.
Siempre habrá soluciones para cualquier problema que se tenga enfrente. Incluso en muchas ocasiones habrá más de una solución. La experiencia de la humanidad nos demuestra que siempre ha habido soluciones ante problemas aparentemente insolubles. Las respuestas siempre estarán esperando a quien las busque con creatividad y ahínco.

No puede aceptarse que un empresario afirme no tener nada por hacer para reducir su costo o mejorar la calidad o la presentación, de sus productos o servicios. Aceptar esa actitud es asumir que la competencia tomará el liderazgo y desplazará a su empresa del mercado.

La creatividad florece cuando se trabaja en equipo

Esto implica que la información fluya libremente, que no se oculte, que todos aporten las mejores ideas. Así, durante el análisis de un problema de la empresa, las soluciones nuevas serán producto de la creatividad de los mejores elementos. De todas las ideas propuestas se habrá de obtener la mejor solución, fruto de la sinergia de todos los que integran la empresa. Las soluciones creativas requieren el esfuerzo conjunto de todos. Es un error contraponer las ideas de cada integrante.

Esto, además de ser frustrante, desgasta al recurso humano. En cambio, conjuntarlas fortalece el sentido de pertenencia de grupo y el compromiso hacia la creatividad, transforma los conflictos en oportunidades de cohesión del grupo y proporciona una alta sensación de éxito. Las personas que componen las organizaciones tienen diferentes carismas o cualidades.

El éxito estriba en aprovechar los mejores activos de cada persona

Así es fácil encontrar personas estructuradas, otras muy orientadas a realizar el trabajo; unas muy imaginativas, otras muy colaboradoras y deseosas de que sucedan las cosas. Sin importar cuáles son sus cualidades, todas tienen su propio potencial de creatividad; por lo tanto, si logramos que cada quien aporte su carisma o activo permeado de innovación se obtendrán resultados muy positivos para la compañía.

Una compañía estaba gastando $ 32 000 mensuales en seis teléfonos celulares de los directivos de la empresa. Ante tal situación, el director de finanzas (estructurado) expuso en la junta el problema; el director de mercadotecnia (imaginativo) propuso sustituir los celulares por localizadores vías satélite, reduciendo el costo a $1 800 mensuales; el director de ventas convenció a todos de la magnífica idea de seguir comunicados, pero con un costo bajo (colaborador) y el director de recursos humanos (práctico) se encargó de hacer el cambio y contratar el nuevo servicio. Como vemos, lo interesante es que cada quien aporte lo mejor de sí para resolver creativamente un problema.

Entrenar al personal con diferentes habilidades para hacer innovaciones

Aunque se tenga la creatividad de manera innata, no puede ignorarse que el aprendizaje es necesario para agilizar el proceso de innovación a través de ejercicios o dinámicas que habrán de desarrollar el pensamiento creativo de quienes conforman la organización.

Principios de oro de la actitud creativa

  • Organice de una manera interesante el mundo que lo rodea.
  • No se deje derrotar. Comience una y otra vez.
  • Ideas absurdas son preferibles a ninguna.
  • Elimine prejuicios.
  • Fortalezca sus fantasías y disfrútelas.
  • No espere a otros. Comience usted mismo.
  • Produzca más ideas de las necesarias.
  • Escoja personas creadoras como ejemplos.
  • Los satisfechos nunca hacen algo importante. Exíjase.
  • Acumule conocimientos e intereses.
  • Formúlese preguntas para las cuales no hay respuestas.
  • Invente lo imposible.
  • Exprese hoy su idea más audaz; mañana será obsoleta.
  • Mire su entorno: encierra mil nuevas ideas.

Fuente: Apuntes de Desarrollo empresarial de la Unideg