Las civilizaciones agrícolas y su forma de vida

En Egipto, la mayoría de la población era agricultora. También había joyeros, canteros, boteros, carpinteros y constructores. Los integrantes de las familias aristócratas ejercían la medicina, la ingeniería, la administración, la legislación o el sacerdocio.

A las mujeres se les instruía en las labores del hogar. Según su condición social, los pobladores de Egipto habitaban en chozas de barro, casas de ladrillo y yeso o en magníficos palacios. La alimentación básica del pueblo egipcio estaba integrada por panes de trigo, cerveza, pescado, frutas y legumbres, complementada con miel, aves, pasteles y vino.

La indumentaria usual era de faldellines, túnicas y vestidos de calidad diversa. Para ellos el aseo personal era considerado como una protección contra las enfermedades.

En Mesopotamia, el Código de Hammurabi definió los asuntos civiles, administrativos, religiosos y mercantiles.

Las casas de los gobernantes y mercaderes de Mesopotamia eran de ladrillo cocido al sol y esmaltado, azulejos, cantera y madera, con muros gruesos y techos planos e inclinados. Todo el pueblo andaba a pie descalzo, con excepción de los hombres ricos. La vestimenta más común consistía, probablemente, en una combinación de camisa y túnica.

La población de la China antigua vivía tanto en el campo como en la ciudad. El emperador residía en la ciudad principal, acompañado de los ministros y servidores de su corte. Las áreas rurales estaban pobladas por campesinos y artesanos, dedicados a sus actividades tradicionales.

Para los chinos, la organización social y el poder del Estado debían conservar un orden; pensaban que la familia dependía del padre y que la sociedad era responsabilidad del gobernante.

La vida de los pueblos de la India se caracterizó por la estricta reglamentación del sistema de castas establecido por los dominadores indoarios. En una sociedad de este tipo, el matrimonio entre personas de distinta casta era considerado el pecado más grave.

El pueblo indio era sumamente religioso, creía en la transmigración del alma. Veneraba a la vaca, al toro y al cebú.

La población india edificó sus ciudades conforme a un plan establecido. Las casas se construían con ladrillos cocidos al sol.