Clamidia

Es una enfermedad causada por una bacteria que afecta a la uretra en los hombres y al cuello del útero en la mujer. Sus síntomas son similares a los de la gonorrea. Si se descubre a tiempo, tiene fácil cura con antibióticos. La clamidia puede infectar tanto a hombres como a mujeres y puede causar daños graves y permanentes a los órganos genitales de la mujer.

La clamidia se conoce como una enfermedad “silenciosa” porque la mayoría de las personas infectadas no tiene síntomas. Si estos se manifiestan, es posible que lo hagan varias semanas después del contagio. Incluso cuando no causa síntomas, la clamidia puede dañar los órganos genitales de la mujer.

En las mujeres, la bacteria infecta inicialmente el cuello uterino (la estructura que conecta la vagina o vía del parto con el útero o matriz) o la uretra (el conducto urinario). Algunas mujeres infectadas tienen flujo vaginal anormal o una sensación de ardor al orinar. Las infecciones que no se tratan pueden propagarse al útero y a las trompas de Falopio (los conductos que transportan los óvulos desde los ovarios hasta el útero), y causar enfermedad inflamatoria pélvica (EIP).

La EIP puede ser silenciosa o causar síntomas como dolor abdominal y pélvico. Aun cuando la EIP no presente síntomas inicialmente, puede causar infertilidad (imposibilidad de quedar embarazada) y otras complicaciones más adelante.

La infección por clamidia puede curarse con antibióticos. Si eres una persona sexualmente activa, utilice preservativos para disminuir sus riesgos de contagiarse. Los especialistas recomiendan que las mujeres de 25 años o menos se realicen pruebas de clamidia todos los años.

Fuente: Instituto Asturiano de la juventud