A los flujos de efectivo en el ámbito financiero se les conceptualiza como las entradas y salidas de dinero generadas por un proyecto, inversión o cualquier actividad económica. También es la diferencia entre los cobros y los pagos realizados por una empresa en un período determinado.
Los Estados de Flujo de Efectivo, en este estado en ocasiones, se denomina estado de Origen y Aplicación ayudando a entender los flujos de efectivo operativos de inversión y de financiamiento.
Los Flujos de Efectivo: Tanto el efectivo como los valores negociables representan una reserva de liquidez que aumenta con las entradas de efectivo y disminuye con las salidas de efectivo, estos flujos de efectivo se dividen en:
Flujos operativos: Son entradas y salidas de efectivo que se relacionan directamente con la producción, la venta de productos y servicios de la empresa.
Flujos de inversión: Son flujos de efectivo que se vinculan con la compra y venta tanto de activos fijos como de áreas de negocios. Desde luego las transacciones de compra producen salidas de efectivo, en tanto que las transacciones de venta, generan entradas de efectivo.
Flujos de financiamiento: Se originan de las transacciones de financiamiento de deuda y de capital contable el hecho de contraer, pagar una deuda a corto o largo plazo daría como resultado una entrada y una salida correspondiente de efectivo, del mismo modo la venta de acciones generaría una entrada de efectivo, el pago de dividendos en efectivo o el reembolso de acciones produciría una salida de financiamiento.