Este gráfico es un cuadro organizado mediante el uso de diagonales, en el que se plasman las relaciones que guarda cada actividad con las demás. Lo que se hace es evaluar la necesidad de proximidad entre las diferentes actividades bajo diferentes puntos de vista. Para construir el gráfico es necesario establecer:
– La lista de actividades.
– El conjunto de criterios bajo los cuales se quiere establecer la necesidad de proximidad entre las diferentes actividades. (seguridad, ruido, olor, etc.)
– Una escala que pueda distinguir la necesidad de proximidad entre actividades.
La escala de valoración que propone Muther es mostrada en la siguiente tabla:
En el gráfico de relaciones que a continuación se muestra, primero se toman las actividades o áreas por pares, se localiza su intersección para después asignar de entre las letras A, E, I, O, U, X, XX, según sea la importancia de proximidad que se tenga entre las áreas o actividades elegidas. Debajo de la letra elegida se anota un número, que representa un código, que a su vez corresponde a una razón por la cual fue elegida la letra en cuestión. Anexo al gráfico deberán ponerse los números y su razón correspondiente, de forma tal que sea posible entender o recordar los motivos de la proximidad o lejanía entre las áreas o actividades.
Para cada relación existe, por lo tanto, un valor y unos motivos que lo justifican. Habitualmente los motivos bajo los cuales se suele establecer el estudio de las necesidades de proximidad, suelen ser los siguientes:
– Importancia de contactos indirectos, administrativos o de información
– Utilización de equipos comunes y accesorios
– Utilización de información común
– Conveniencias personales
– Necesidad de inspección y control
– Ruidos
– Polvos
– Humos
– Peligros
– Distracciones o interrupciones
– Recorrido de los productos
La elaboración de la gráfica de relaciones permite iniciar el análisis del problema, tomando en cuenta elementos como la seguridad, el control, el confort y la integración.
En los casos en que no existan en el estudio superficies diferentes a las destinadas a las operaciones directamente ligadas al proceso productivo, no será necesario llevar a cabo este análisis, con el análisis del recorrido será suficiente para determinar las relaciones entre dichas operaciones. Sin embargo esta situación es difícil de encontrar en las industrias.
En la práctica, se lleva a cabo el análisis del recorrido entre las actividades directamente involucradas en las operaciones productivas, y la gráfica de relaciones complementa la información para los servicios auxiliares.
El gráfico de relaciones permite tener en cuenta las opiniones de varias personas, tanto de diseñadores de plantas como de las personas directamente involucradas en el funcionamiento de la planta, o de quienes posteriormente trabajaran en la planta.
La primera etapa para elaborar el gráfico consiste en identificar las actividades y numerarlas en el documento. Cuando se introduce un número excesivo de actividades la interpretación de los resultados se vuelve confuso. Los límites recomendados prácticos se sitúan entre 40 y 50 actividades como máximo.
Para establecer las relaciones entre actividades hay que tener en cuenta muchos factores como pueden ser las fuentes de energía, las características del terreno o de la construcción, la orientación de los edificios, las vías de comunicación. Es posible incorporarlas como actividades en el gráfico de relaciones, para que se vean involucradas en las relaciones.
El proceso para analizar las relaciones entre actividades se puede resumir de la siguiente forma:
IDENTIFICAR todas las actividades a estudiar (sean departamentos, secciones, operaciones, características) y agruparlas en actividades comunes, siendo conveniente no sobrepasar de cincuenta actividades.
NUMERAR las actividades en el gráfico de relaciones, incluyendo primero las directamente involucradas en las actividades productivas y luego los servicios, pudiendo considerar también los elementos fijos como elevadores, salidas de emergencia, etc.
DETERMINAR la relación entre cada par de actividades y los motivos correspondientes. Para ello se requiere del conocimiento previo que se tenga de las instalaciones o servicios, por el flujo de materiales que existe o pudiera existir, por recomendación de los responsables de cada sección, por la información que puede ser obtenida mediante encuestas, entrevistas, etc.
ELABORAR el gráfico de relaciones a partir de los datos obtenidos.