La medición de la productividad es, en algunos casos, bastante directa, como cuando la productividad puede ser medida como horas de mano de obra por tonelada de un tipo específico de acero, o como la energía necesaria para generar un kilowatt de electricidad.
Sin embargo, en muchos casos, existen problemas sustanciales para llevar a cabo la medición.3 Ahora examinaremos algunos de estos problemas de medición.
1. La calidad puede variar mientras la cantidad de insumos y salidas permanece constante. Compare un radio de esta década con uno de dos años cuarenta. Ambos son radios, pero sólo unos cuantos pueden negar que la calidad ha mejorado. La unidad de medida (un radio) es la misma, pero la calidad ha variado.
2. Los elementos externos pueden causar un crecimiento o disminución en la productividad por el cual el sistema en estudio puede no ser el directamente responsable. Un servicio de suministro eléctrico más confiable puede mejorar de gran manera la producción, de ahí que la mejora en la productividad de la empresa se deba más a este sistema de soporte, que a las decisiones administrativas que se
hayan tomado.
3. Pueden hacer falta unidades precisas de medición. No todos los automóviles requieren de los mismos insumos; algunos automóviles son subcompactos; otros son Porsches 944.
Fuente: Apuntes de Introducción de Sistemas de Producción de la Unideg