Un libro como éste, que se refería a diferentes enfoques teóricos, debe dar la impresión de que el escenario de la ciencia contemporánea está seriamente fragmentaría estar más lejos de la verdad. Aunque existe desacuerdo dentro de cualquier grupo de científicos, entre los teóricos del aprendizaje las discrepancias por lo común no se refieren a los resultados básicos o a los principios fundamentales, sino más bien a la interpretación que ha de darse a ciertos hechos. Dentro del escenario contemporáneo en la teoría del aprendizaje, los desacuerdos no se suscitan alrededor de aspectos primordiales, a excepción de la gran división que todavía persiste entre los conductistas skinnerianos y los psicólogos cognoscitivistas todos los cuales compiten por la supremacía. Pero esa impresión es terriblemente equivocada.
Estos dos enfoques implican orientaciones metodológicas muy distintas, diferentes compromisos acerca del objeto de estudio de la psicología, y diversas restricciones referidas a qué tipos de teorías son admisibles.
Aunque el teórico del aprendizaje social acepta los preceptos usuales del conductista en contra de la invocación de “causas internas” psicodinamicas de la conducta desequilibrada, los atempera con un énfasis opuesto sobre el papel del funcionamiento cognoscitivo simbólico en la adquisición de nuevas conductas, y en la reorganización de la frecuencia y las ocasiones de aparición de las mismas.
Cómo sabemos, las teorías tradicionales del aprendizaje han recalcado el aprendizaje por la experiencia directa, mediante la aplicación de contingencias de reforzamiento a las respuestas practicadas.
Esto se condensa en las nociones de “aprendizaje por acción“, de diferenciación de la respuesta, y del moldeamiento de cadenas conductuales complejas mediante la aproximación sucesiva. La teoría del aprendizaje social acepta esos principios del moldeamiento, aunque tiende (casi como Tolman) a concebir el papel de las recompensas en este proceso en el sentido de que transferir información acerca de la respuesta óptima en la situación, y proporcionan también motivación de incentivo para un acto dado debido a la recompensa anticipada.