Desierto, principales desiertos

Introducción

El desierto es el término aplicado a regiones áridas de la Tierra con escasez o carencia de precipitaciones, poca o nula vegetación y limitada ocupación humana. Debido a la falta de humedad en el suelo y en la atmósfera, los rayos del Sol inciden con fuerza. Las temperaturas durante el día pueden alcanzar los 55 °C a la sombra; durante la noche, el suelo del desierto irradia el calor a la atmósfera y las temperaturas pueden descender hasta el punto de congelación.

Vientos

La mayoría de las regiones desérticas se formaron por los movimientos de masas de aire alrededor del planeta en conjunción con otros factores geográficos. Los movimientos descendentes de masas de aire caliente alrededor de la Tierra han producido dos cinturones de desiertos, uno a lo largo del trópico de Cáncer, en el hemisferio norte, y otro a lo largo del trópico de Capricornio, en el hemisferio sur.

Entre los desiertos del hemisferio norte cabe destacar el de Gobi, entre China y Mongolia, los desiertos del suroeste de Norteamérica, el Sahara en el norte de África y los desiertos Arábigo y de Irán en el Oriente Próximo. A lo largo del cinturón sur se encuentra la Patagonia en Argentina, el desierto de Kalahari en el sur de África, y el Gran Desierto Victoria y el Gran Desierto de Arena en Australia.

Cuando las aguas frías se desplazan desde las regiones árticas y la Antártida hacia el ecuador y entran en contacto con los bordes de los continentes pierden temperatura; las corrientes de aire se enfrían al cruzar sobre estas aguas, cargándose de niebla y aire húmedo pero sin provocar precipitaciones.

Clima

Los desiertos están distribuidos entre distintas zonas:

Zonas semiáridas o esteparias: Tienen una media de precipitaciones de 250 a 500 mm anuales.
Zonas áridas: Con precipitaciones anuales de 25 a 250 mm, abarcando el 16 % de la superficie terrestre
Zonas hiperáridas: Son tan secas que a veces no llueve durante años. Éstas abarcan el 4 % de la superficie terrestre. Temperatura entre 30 y 40 grados centígrados durante el día y de -10 a 0 grados centígrados durante la noche.

Principales desiertos

Gran parte de los desiertos del mundo se ubican en zonas caracterizadas por las altas presiones constantes, condición que no favorece a la lluvia. Entre los desiertos de mayor importancia tenemos:

los desiertos del Sáhara (el más extenso de la Tierra),
Kalahari,
Namib y del Ogaden en África
los desiertos Arenoso, Victoria en la mayor parte de Australia
los desiertos de Gobi (o Cham?), Kara Kum, Takla Makán, de Arabia, Rub Al Jalí, de Siria, de Judea, Sinaí-Néguev en Asia, y los desiertos de Arizona-Sonora, Mojave, Atacama, de Sechura y los Médanos de Paraguaná en América.

Adaptación vegetal

Todos los desiertos, excepto los más áridos, albergan seres vivos bien adaptados a la ausencia de agua y a los cambios de temperatura. Las plantas han desarrollado formas de conservar y usar eficientemente el agua. Algunas plantas con flor viven como mucho unos días.

Las plantas leñosas de los desiertos, o bien tienen largos sistemas de raíces que alcanzan fuentes profundas de agua, o bien han extendido raíces poco profundas que son capaces de captar rápidamente la humedad que el rocío y las lluvias ocasionales dejan en la superficie. Las plantas del desierto tienen normalmente las hojas pequeñas; esto permite que conserven el agua mediante la reducción del área por la que transpiran.

Otras plantas pierden sus hojas periódicamente. El proceso de fotosíntesis, que se realiza principalmente a través de las hojas y mediante el cual la luz del Sol se convierte en energía almacenada, es realizado en el desierto por los tallos.

Adaptación animal

Los pocos anfibios que existen entre los animales del desierto son capaces de estar largo tiempo en letargo durante los periodos secos. Muchos pájaros y roedores sólo se reproducen durante los periodos siguientes a las lluvias de invierno, época en la que se produce el crecimiento de la vegetación. Algunos roedores del desierto, como la rata canguro norteamericana y el jerbillo africano, se alimentan de semillas secas.

Entre los animales de mayor relevancia encontrados en el desierto están los camellos y el lagarto cornudo los cuales pueden controlar la producción de calor de su cuerpo, variando el ritmo de los latidos de su corazón y su metabolismo.

Mamíferos como el órix, poseen la capacidad de hacer oscilar las temperaturas de sus cuerpos captando calor durante el día y liberándolo durante la noche.