Voz pasiva, definición y uso

Definición

El sujeto gramatical recibe o padece la acción del verbo, coincide con el objeto. El agente puede estar especificado o no. La voz pasiva sólo puede darse con verbos transitivos: Unos libros son comprados por Luis. La construcción en voz pasiva supone que el objeto de la acción pasa a primer plano en la atención del hablante, en detrimento del agente de la misma: La casa fue construida por mi padre; Ha sido sitiada la ciudad.

La relación semántica existente entre sujeto, verbo y objeto es la misma en una y otra. La diferencia consiste en que se modifica el punto de vista, en la voz pasiva es el objeto el que atrae el interés del hablante.

En español no existen morfemas específicos de voz, la categoría se expresa mediante giros sintácticos. La voz pasiva se realiza mediante el auxiliar ser + participio concertado: Luis ama a Carmen, voz activa. Carmen es amada por Luis, voz pasiva.

El complemento directo ‘Carmen’ pasa a ser sujeto en la transformación pasiva, mientras que el sujeto gramatical ‘Luis’ pasa a desempeñar la función del complemento agente, complemento exclusivo de las construcciones pasivas.

Voz antipasiva

La voz antipasiva de las lenguas ergativas con flexión se puede focalizar el agente a la posición habitual del paciente, marcándolo con caso absolutivo y marcando el verbo con una marca de antipasivo.

Así cuando el paciente de una acción es desconocido o no se quiere mencionar se usa la forma antipasiva del verbo y se coloca al agente en caso absolutivo.

Un ejemplo de esto son las lenguas mayas, en donde las marcas de antipasivo intrasitivizan el verbo. Por ejemplo en Tz’tujil la marca de antipasiva es -oon:

(activa)
(1) x-in-aa-ch’ey (COMPLETIVO-1ªABS-2ªERG-golpear) = ‘me golpeaste’
(antipasiva)
(2) x-at-ch’ey-oon-i = (COMPLETIVO-2ªABS-golpear-INTR) ‘golpea(ba)s’

En la primera de las oraciones anteriores la marca de segunda persona (-aa-) está en ergativo como corresponde normalmente a un agente, pero en la segunda la marca de segunda persona (-at-) está en absolutivo (que es la marca normalmente usada en la voz activa para marcar el paciente).

Junto con estas dos formas el Tz’utujil tiene también una voz pasiva genuina cuando el agente no se conoce o no se menciona, siguiendo con la misma serie de ejemplos:

(activa)
(3) x-in-ch’ejy-i (COMPLETIVO-1ªABS-2ªERG-golpear-PAS-INTR) = ‘fui golpeado’

En esta última oración la marca de primera persona (-in-) resulta idéntica (1), pero el agente no se expresa. La marca que permite reconocer que el verbo tiene un sentido pasivo es (-j-) infijada en el verbo.

Oraciones

En español solo pueden construirse oraciones con verbos transitivos, aunque hay un número reducido de verbos transitivos que no admiten la construcción pasiva, como por ejemplo, haber o tener.

Las oraciones. Hay un perro y Tengo un gato, ambas con un complemento directo, no pueden transformarse en pasivas; Un perro es habido y Un gato es tenido por mí son incorrectas.

Las oraciones activas y pasivas están relacionadas según el siguiente esquema:

Activa: Sujeto (gramática) + verbo + Complemento directo
Pasiva: Sujeto paciente (complemento directo de la activa) + verbo ser + Participio del verbo + Complemento agente (sujeto de la activa)
Pasiva refleja. Además de la pasiva analítica ser + participio, existe en español otra forma de expresar la voz pasiva: la pasiva con se o pasiva refleja. Esta construcción está mucho más generalizada que la anterior, que apenas se usa en el lenguaje oral.

La pasiva refleja solo es posible en 3ª persona; se no tiene aquí función nominal: es una marca o morfema de pasividad. El sujeto gramatical normalmente aparece pospuesto, y debe concordar en número y persona con el verbo:

Se vende un perro
Se venden perros

Uso de la voz pasiva

Esta construcción no es muy importante en el español corriente, aun mucho menos que en francés y todavía menos que en lenguas como el inglés.

Sin embargo, es conveniente tener ciertas nociones sobre su construcción y uso. La voz pasiva se utiliza esencialmente para poner en evidencia el sujeto.

No se expresa el agente de la acción -en la frase pasiva- si se trata de alguien o algo indefinido y no importante o bien si no lo conocemos ni nos interesa.

Ejemplo:
Las mercancías han sido enviadas con retraso.
Durante la huelga, el correo no fue distribuido.
El nuevo estadio será terminado antes de un año.
Una famosa actriz acaba de ser secuestrada a la puerta de su casa.
El peligroso terrorista es buscado por la policía.
Mi padre fui siempre considerado como un gran experto.