El relieve como factor de distribución de la población en el mundo fundamentos

En general, se puede decir que las regiones de mayor altitud tienen bajas densidades de población. A medida que aumenta la altitud descienden las temperaturas, por lo que en las altas cumbres el clima es muy frío. Pero, además, por encima de una determinada altitud no hay oxígeno suficiente para permitir muchas de las actividades e incluso la vida del hombre.

Únicamente aparecen importantes concentraciones de población a una cierta altitud en las montañas de las regiones cercanas al Ecuador. En efecto, en las regiones ecuatoriales el clima es cálido y húmedo, por lo que al ascender en altitud las temperaturas disminuyen y se hacen más soportables. Esto ocurre, por ejemplo, a una cierta altitud, en las montañas del África ecuatorial o en los Andes peruanos, donde las densidades de población son mayores que en zonas cercanas más bajas (la cubeta del Congo y la selva amazónica peruana, respectivamente).

Por otro lado, las montañas suelen resultar un medio inhóspito para el hombre no sólo por la crudeza de su clima, sino también por lo abrupto de sus pendientes, que dificulta las labores agrícolas y las propias comunicaciones.

En resumen, se puede decir que la población trata de evitar vivir en las montañas y se asienta preferentemente en las llanuras.

La fertilidad de los suelos y los recursos minerales cómo factor de distribución de la población en el mundo

Algunas regiones tienen tierras especialmente fértiles,lo que hace posible la alimentación de una numerosa población. Esto ocurre, por ejemplo, en algunas zonas de la China, donde la fertilidad del suelo ha permitido siempre la existencia de altas densidades de población. Otros suelos, por el contrario, tienen una fertilidad muy reducida, por lo que no resulta rentable su puesta en cultivo.

También la existencia de recursos minerales puede ser la causa de que en determinadas regiones se concentre la población. Así, las minas de carbón de Inglaterra atrajeron a una gran cantidad de población en el siglo XIX. Hoy, los grandes ya cimientos de África del Sur atraen también a un gran número de inmigrantes.