Una vez que el investigador de mercados ha identificado y clasificado el tipo de información que necesita para resolver su problema de manera concluyente, tiene que proceder a reunir dicha información.
Para ello necesitará diseñar algún método, teniendo presente que la calidad de las respuestas obtenidas dependerá en gran medida de la forma en que se plantee las preguntas al público que intervenga en la encuesta, aun cuando esta regla parece muy simplista, en la práctica sucede con frecuencia que quienes preparan los cuestionarios son personas que no conocen la técnica o que no utilizan adecuadamente el lenguaje y, por lo tanto, la calidad de las respuestas obtenidas es sumamente pobre.
En otras palabras, el trabajo de elaborar un cuestionario parece fácil pero no lo es. Antes de aplicarse de manera definitiva, el cuestionario requiere un buen diseño, análisis exhaustivo y repetido, y la elaboración de pruebas preliminares. Explicar cada uno de estos pasos es la intención de esta unidad.