A pesar de haber aplicado las encuestas con sumo cuidado, es posible que los entrevistadores hayan incurrido en errores como: no anotar los datos completos del entrevistado, no seguir el orden correcto de las instrucciones del formulario, anotar algún dato de manera equivocada o bien hacer omisiones.
Éstos y otros problemas deben corregirse antes de poder codificar los datos. La edición es el proceso de revisar y ajustar los datos para detectar omisiones, verificar que sean legibles y consistentes y prepararlos para su codificación y almacenamiento.
En esta etapa, el investigador busca eliminar los errores provenientes de los datos “en bruto”. Pretende también clasificar dichos datos para poder llevar a cabo su captura. Para realizar una buena edición, debe existir un criterio uniforme y homogéneo para todas las encuestas y para todos los encuestadores. Deben revisarse aspectos como:
- La fidelidad a las instrucciones del muestreo.
- La legibilidad de los datos.
- Su terminación.
- Su consistencia.
- Su comprensión.