Confucianismo

Contenido: Introducción. Clave de la ética confuciana. Sociedad en el confucianismo. Métodos del confucianismo. Principios básicos del confucianismo. Neoconfucianismo.

Objetivo: Al finalizar la competencia describirá los fundamentos teóricos del confucianismo, sin error.

Introducción

Introducción al Confucianismo Confucianismo o Confucionismo, principal sistema de pensamiento en China; se desarrolló a partir de las enseñanzas de Confucio y sus discípulos, y tenía que ver con los principios de la práctica del bien, la sabiduría empírica y las propias relaciones sociales.

El confucianismo ha influido en la actitud china ante la existencia, fijando los modelos de vida y pautas de valor social, y proporcionando la base de las teorías políticas e instituciones chinas. Desde China se extendió a Corea, Japón y Vietnam y en las últimas décadas ha despertado interés entre los eruditos de Occidente.

Aunque el confucianismo llegó a ser la ideología oficial del Estado chino, nunca ha existido como una religión establecida con una iglesia y un clero. Los eruditos chinos alabaron a Confucio como gran maestro y sabio, pero nunca lo adoraron como a un dios.

Confucio tampoco se proclamó a sí mismo una divinidad. A diferencia de las iglesias cristianas, los templos erigidos en honor a Confucio no eran lugares en los que grupos organizados se reunían para alabarle, sino edificios públicos diseñados para ceremonias anuales, en particular el cumpleaños del filósofo.

Varios intentos para divinizar a Confucio y ganar prosélitos al confucianismo fracasaron debido a la naturaleza secular de su filosofía.

Los principios del confucianismo están recogidos en los nueve libros antiguos chinos transmitidos por el maestro y sus seguidores, que vivieron en una época de gran inquietud filosófica. Estos escritos pueden dividirse en dos grupos: los Cinco Clásicos y los Cuatro Libros.

Clave de la ética confuciana

La clave de la ética confuciana es jen, traducido de diversos modos como ‘intuición humana’, ‘amor’, ‘bondad’ y ‘humanidad’.

Clave de la ética confuciana
Clave de la ética confuciana

Jen es una virtud suprema que representa las mejores cualidades humanas.

En las relaciones humanas, aquellas que se construyen entre una persona y otra, jen se manifiesta en chung, o la fidelidad a uno mismo y a los demás, y shu, o altruismo, mejor expresado en la regla de oro del confucianismo: “No hagas a los otros lo que no quieras que te hagan a ti mismo”.

Otros valores virtuosos importantes en el confucianismo son la honradez, la decencia, la integridad y la devoción filial. Quien posea todas estas virtudes será un chün-tzu (caballero perfecto).

En el plano político, Confucio defendía un gobierno paternalista en el que el soberano fuera benévolo y honorable y los súbditos respetuosos y obedientes.

El estadista debe cultivar la perfección moral para dar buen ejemplo a la gente.

En educación Confucio apoyó la teoría, notable para el periodo feudal en que vivió, resumido en el principio: “en educación, no hay diferencia de clases”.

Sociedad en el confucianismo

El confucianismo ve solamente al hombre realizado en tanto ser social que ocupa un puesto y desempeña una función, no como un ser aislado. En la idea confuciana de la sociedad utópica, la jerarquía no es sólo social, sino también moral.

Sociedad en el confucianismo
Sociedad en el confucianismo

En la China antigua, la familia no era un núcleo reducido, sino un gran clan, muchos de sus miembros vivían bajo un mismo techo, reconocían un antepasado en común y mantenían vínculos con otros grupos del mismo origen.

Una familia así era una prefiguración del Estado.

Así, la familia era vista como un pequeño reino con jerarquías, protocolos y métodos de gobierno, y el Estado como una gran familia en la que debe haber afectos, relaciones y obligaciones morales.

En la familia, los miembros están jerarquizados mediante un complejo sistema.

El aprendizaje del hombre superior se iniciaba en la familia y dificultosamente podrá el hombre gobernar el Estado si no puede gobernar primero su familia.

A pesar de lo dicho anteriormente, para los confucianos todos los hombres son de naturaleza básicamente igual, independiente de su posición o lugar de nacimiento.

Métodos del confucianismo

Los medios para alcanzar la máxima excelencia o Zhi shan eran dos: el estudio y la introspección, entendida como un mirar hacia dentro, es decir, el conocimiento pleno de uno mismo.

Métodos del confucianismo
Métodos del confucianismo

El estudio de textos antiguos y de las lecciones de los sabios y la naturaleza es la base de la mejora individual. Además, sirve como soporte para la introspección porque el hombre debe ver qué hay de bueno dentro de sí y desarrollarlo.

La bondad natural humana, capital en las enseñanzas de Mencio, parte del mismo principio de que lo bueno se encuentra dentro del hombre y que debe ser descubierto usando la introspección.

También el confucianismo da gran importancia a los ritos.

Al ser una forma de conservar el pasado mítico que fue legado, el confucianismo apoya que se los siga practicando y les da nuevos valores.

Eran vistos por los confucianos como un símbolo de jerarquía y poder.

Además, son un método de autodisciplina y dominio de uno mismo, al hacer que el individuo deba realizar algo de una manera precisa.

Los ritos garantizan que la sociedad y el Estado funcionen correctamente, ya que las acciones del gobierno deben tener orden y jerarquía.

Principios básicos del confucianismo

El pecado original es inconcebible para Confucio, para quien el hombre se encuentra inmerso en un orden meramente natural.

Principios básicos del confucianismo
Principios básicos del confucianismo

La verdad (es decir, el principio verdadero y racional que se halla en el interior de todos los hombres y en todos por igual) es el camino del cielo, y el principal deber del hombre consiste en meditar sobre ella y descubrirla en todo su contenido y significado.

Existe un solo medio para ser sinceros y veraces en todo: alcanzar la virtud, porque sin virtud no existe veracidad ni sinceridad verdadera. Esto puede conseguirse por medio de la corrección en el trato fraterno, entre otras actitudes y cualidades que son connaturales al hombre.

El confucianismo afirma que no basta con cumplir con los deberes personales y familiares, porque cuando alguien puede ser útil en el desempeño de un cargo público, falta a su deber si se aleja de la política.

Respecto a su vertiente religiosa, debe advertirse que el confucianismo sólo se desarrolló y expuso como una doctrina religiosa mucho tiempo después de la muerte de Confucio y, al parecer, por intereses creados y prescindiendo de la auténtica obra del maestro.

Pese a su influencia en muchas actitudes religiosas, el confucianismo debe considerarse más bien una doctrina ética; y pese a que en ella se tenga en cuenta la existencia de un principio regulador del universo y de un ser supremo, los conceptos básicos de la doctrina son esencialmente referentes al ser humano y a cómo debe relacionarse con sus semejantes. Confucio fue mucho más un humanista que un místico.

Neoconfucianismo

Las actividades intelectuales durante la dinastía Song (960-1279) dieron origen a un nuevo sistema de pensamiento confuciano basado en una mezcla de elementos budistas y taoístas; la nueva escuela de confucianismo fue conocida como neoconfucianismo.

Los eruditos que desarrollaron este sistema intelectual conocían bien las otras dos filosofías. El exponente más famoso de una de esas escuelas fue Zhu Xi, un eminente pensador sólo superado en prestigio por Confucio y Mencio, que estableció una nueva base filosófica para las enseñanzas del confucianismo estructurando la opinión erudita en un sistema coherente.

Neoconfucianismo
Neoconfucianismo

Según el sistema neoconfuciano que representaba Zhu Xi, todos los objetos en la naturaleza están compuestos de dos fuerzas inherentes: li, un principio inmaterial universal o ley, y ch’i, la sustancia de la que están hechas todas las cosas materiales. Zhu Xi identifica el li en la humanidad con la naturaleza humana, que es en esencia la misma para todo el mundo.

Así, aquellos que reciben un ch’i que es turbio encontrarán su naturaleza original oscurecida y deberán limpiar su naturaleza para restaurar su pureza. La pureza puede alcanzarse ampliando el conocimiento propio del li en cada objeto concreto.

Opuesta a la escuela del li (ley) está la escuela de neoconfucianismo hsin (mente). El máximo exponente de la escuela hsin fue Wang Yang-ming, quien enseñó la unidad de conocimiento y de práctica.

Durante la dinastía Qing (1644-1912) hubo una fuerte reacción a ambas escuelas de pensamiento neoconfucianas, li y hsin. Desarrollaron una crítica textual de los clásicos confucianos basada en la metodología científica, utilizando la filología, la historia y la arqueología para reforzar su erudición.

Además, eruditos como Tai Chen introdujeron un punto de vista empirista en el conjunto de la filosofía confuciana. K’ang Yu-wei, un líder del movimiento reformista confuciano, acaudilló un intento de exaltar la filosofía como una religión nacional.

Debido quizá a las amenazas extranjeras a China y a la demanda urgente de medidas políticas drásticas, los movimientos reformistas fracasaron; en la confusión intelectual que siguió a la Revolución China de 1911, el confucianismo fue tachado de decadente y reaccionario.

Con el colapso de la monarquía y de la estructura familiar tradicional, de la que se derivaba mucha de su fuerza y apoyo, el confucianismo perdió su influencia en la nación.

En el pasado, a menudo había conseguido hacer frente a las adversidades y emerger con renovado vigor, pero durante este periodo de cataclismo social inaudito, perdió su habilidad anterior para adaptarse a las circunstancias cambiantes.

En opinión de algunos especialistas, Confucio será venerado en el futuro como el gran maestro de China; los textos clásicos confucianos serán estudiados y las virtudes del confucianismo, personificadas para innumerables generaciones en las máximas familiares y en la práctica del sentido común de la población china, permanecerán como la piedra angular de la ética.

Sin embargo, es dudoso que el confucianismo vuelva a jugar el papel crucial en la vida política e instituciones chinas que desempeñó en los siglos pasados. Muchas tradiciones inspiradas en las enseñanzas de Confucio fueron marginadas o proscritas. El sistema familiar, por ejemplo, otrora muy reverenciado como una institución central confuciana, perdió su importancia.

Fuentes: Enciclopedia encarta.org / Wikipedia.org / historia-religiones.com.ar