Introducción
La composición de las artes visuales son actividades propias del ser humano, mediante las cuales se satisfacen ciertas necesidades estéticas y prácticas. Constituyen una unidad orgánica que permite ordenar los elementos conceptuales, visuales y técnicos, necesarios para el acto creador. La composición de las artes visuales es la forma total con la que se comunica una plástica, la percepción visual es el medio idóneo para acceder a esta comunicación.
Tipos de composición
- Composición simétrica: Consiste en agrupar simétricamente cada uno de los elementos de la composición, generando un equilibrio visible en toda la imagen compositiva. Este tipo de composición puede darse de manera vertical u horizontal, teniendo en cuenta el color, las formas y los tamaños.
- Composición asimétrica: Consiste en agrupar de manera asimétrica todos y cada uno de los elementos compositivos, generando armonía, pero sin la rigurosidad de mantener el equilibrio de manera simétrica.
- Composición radial: Consiste en seleccionar un elemento de la composición como el objeto principal de la misma, a la vez que es ubicado en el centro del espacio compositivo, no dejando de lado los demás elementos que complementan la composición. Es importante guardar siempre armonía en la composición.
Forma exterior e interior
La mayor parte de las composiciones plásticas tienen dos aspectos formales distintos: exterior e interior. La escultura por ejemplo, se ocupa por lo general tan solo de la forma interior, si bien esto no es siempre así. En otros casos, solo la forma interior tiene importancia; como en las tumbas egipcias excavadas en la roca y en muchas escenografías y diseños para display. Casi siempre ambos aspectos se separan y difieren. Otras, se unen estrechamente. Esa misma relación puede crear un problema focal.
Las catedrales góticas son un ejemplo de esto: su volumen interior, nave, alas, crucero, capillas laterales, etc. están todos directamente expresados en la forma exterior. Para lograr el mismo efecto, los arquitectos usan transparencia y penetración. Nos ayudará considerablemente al visualizar formas plásticas el tener en cuenta esta distinción.
Veremos en breve que estos elementos plásticos actúan a este respecto de modos diferentes. Mucho de su efecto espacial resulta de acentuar sus características inherentes de forma interior. Podemos casi afirmar que es espacio, como elemento plástico, depende de estas actividades interiores.
Forma cerrada y abierta
Ciertas composiciones plásticas parecen estar contenidas dentro de un simple volumen de encierro, generalmente de orden geométrico. Llamamos a esto envoltura formal: todo ocurre dentro de ella, nada se proyecta hacia el exterior. Esta superficie terminal de la forma la aísla del espacio circundante.
Cualquier actividad espacial que pueda tener se ejercerá dentro de la envoltura. Como arquetipo arquitectónico de esto podemos considerar el Partenón. En rectángulo sólido de la cella, rodeado por la columnata, que termina en los planos inclinados del techo, expresa una simple envoltura formal. Se siente la interrelación de todas las partes con respecto a este concepto denominarte. La típica casa colonial de Nueva Inglaterra tienen la misma cualidad.
El diseño industrial moderno ofrece una tendencia similar. Tomemos como ejemplo el automóvil: el montaje de los elementos, la cubierta del motor, la carrocería, el espacio para los pasajeros, el techo, el guardabarros y el baúl, en los modelos antiguos se reunirán únicamente en base al funcionamiento.
Visualmente constituían un ensamblaje más que una unidad. Lo que el diseñador moderno trata de hacer es unir todos estos elementos para que expresen una sola y unificada envoltura formal. Sentimos a veces que este problema lo ha dominado a tal punto que olvida con frecuencia algunos de los requisitos funcionales importantes. El mismo criterio se ve en escultura.